domingo, 22 de noviembre de 2009

Obra maestra

Ayer, tuve el placer de disfrutar un largometraje que marcara un hito durante los siguientes años venideros, se trata del filme 2012, una película del director Roland Emerich (Independence Day, Stargate...).

Es la primera película que es superada por su propio trailer.

A ver, esta claro que yo sabía a lo que iba, a destrucción masiva, y efectos piro musicales de primera categoría, todo mezclado con alguna historia patriótica americana. Pero me llevé una tremenda sorpresa. Aunque antes que nada analicemos los pros y contras.


PROS:

-Sale Florentino Fernández haciendo caras (el gordo con gafas).


CONTRAS:

-Dura demasiado (casi 3 horas!!).
-El guión no llega a la altura de retrasado mental.
-Tomadura de pelo continua.
-Intentan hacer partes cómicas o entrañables, y ahí se quedan en el intento.
-Abusan de la lágrima fácil.
-Los actores principales son dignos del youtube.
-Los actores de reparto son infumables.
-El doblaje se ha hecho en un locutorio.
-Respecto a la BSO decir patética sería elogiarla.
-Los efectos visuales son espectaculares estéticamente, pero no tiene ni ton ni son. Los edificios siempre caen para el mismo lado.
-Entre el 2009 y 2012 se ponen de moda las televisiones retro. En el despacho oval, aun compran televisores de rayos catódicos BlueSky.
-Deprimentes escenas en las que los actores buscan la humanidad.
-Sorprendente que la hija del presidente después de saber que han muerto millones y millones e personas, se entristezca al ver que un tío muere en la tele.
-El actor principal roza lo vomitivo.
-Esta claro, mientras más caro sea el avión, antes fallara. Aparte de que mientras más grande sea menos asientos tiene.
-Si esperabas algo sobre la cultura azteca, no lo esperes.
-Europa somos la última mierda, no tenemos decisión ninguna.
-Los rusos...lo de siempre.
-Faltó una bandera norteamericana ondeando.
-Las limusinas americanas las fabrican con el mismo material que los tanques.
-etc...


En definitiva, bodrio total, que marca un antes y un después.

Mi nota: 0, y porque no se puede poner menos.