lunes, 2 de agosto de 2010

Relatos breves nº12: Trolas, In Memoriam

Trolas, In Memoriam


Se llamaba Pedro Jiménez Álvarez, aunque casi nadie le conocía por ese nombre, en cambio si preguntas por el Trolas, todo el mundo te sabrá decir quién es.

Era un chico más del barrio, con problemas familiares como en todas las casas. Su historia es un tópico de la sociedad del siglo XXI, ya sabéis: embarazo de adolescente, él no quiere, ella tiene miedo, familia religiosa y niño a la de 3. Pues vaya, así nació el Trolas, viviendo con su madre de 15 años en casa de sus abuelos.
El bebé paulatinamente fue creciendo, y cuando tenía 6 años, su madre lo abandonó a merced de sus abuelos. Ya sabéis: chica inmadura de 21 años conoce a tío duro pelo pincho con buen coche que le promete el cielo, y ella cae rendida a sus huesos. Se ve que el chico trabajaba en la construcción y tenía que mudarse a otra ciudad, y su madre aprovechó la ocasión para dejar el muerto a los suyos. Poco se sabe de ella.
El Trolas tuvo que criarse con sus abuelos, y todos sabemos lo que es eso. Si ya cuesta a un padre entender el mundo en el que viven sus hijos (y eso que ronda una distancia de 30 años de generación a generación), imaginaos un abuelo. Se crió a base de consentimientos, Play Stations, y materialismo.
Como en cualquier colegio, el que más juguetes tiene es el dueño y señor de la clase, así que desde muy pequeño el Trolas fue el centro de atención de todos sus compañeros (entre los cuales me incluyo yo). Su vida se basaba en restregarnos todo lo que poseía, y todo lo que le permitían sus abuelos hacer.
Pasaron los años, y llegó el instituto, para el Trolas fue todo genial. Moto a los 14, piercing a los 15, y novia a los 16. El sueño de cualquier primate adolescente lo tenía él. Y a base de campanas y trapicheos de drogas consiguió ganarse un poco de pasta.
Pero no todo fue un “jardín de las delicias”, a los 12 esnifaba pegamento, a los 13 fumaba cigarros, a los 14 probó los porros, a los 15 probó el cristal, a los 16 era adicto a la cocaína, y de ahí para delante palabras como Heroína, Speed se hicieron hueco en su particular diccionario.
Hasta los 17 le fue bien, tenía pasta para comprar cosas, y si el negocio le iba mal siempre podía robar dinero a sus abuelos, pero todo cambió cuando el viejo la palmó. Su abuela, no se quiso hacer cargo de él, tal vez fuera por aquella ocasión en el que él, ante la necesidad de devolver cierta cantidad grande de pasta, amenazó con un cuchillo a su progenitora para que le diese la pasta.
Se intentó buscar la vida, pero los amiguetes con los que jugaba a futbol, no le quisieron abrir las puertas. Su tercera novia le dejó, y le dijo que ella quería seguir estudiando y sacarse alguna titulación. Él ni siquiera había pasado segundo de ESO. Estaba mal, muy mal. Después de pasar unos días en la calle, cometió un delito (otro de tantos), pero la diferencia es que la policía le atrapó, y le condujo a un centro de menores.
Le quitaron sus posesiones (moto, y el coche que le había dejado el abuelo), y durante un tiempo estuvo controlado.
Cuando cumplió los 18 le dejaron. Volvió a la calle, y consiguió que su abuela lo volviese a aceptar. Intentó resurgir el negocio de las drogas, pero era ya muy tarde, estaba totalmente enganchado. Cada día se metía una o dos rayas, y si podía en días importantes (ya conocéis Nochebuena, Navidad, Epifanía del Señor…) se proporcionaba un chute.
A los 20 su abuela vuelve a echarlo, estaba muy desfigurado, no pesaría más de 60 kilos, y eso que medía casi 180 cm, vestía siempre la misma ropa, y se dedicaba a robar motos y vendérselas a un gitano a 100 euros. Con esa pasta conseguía, si podía inyectarse un poco de droga.
Hace poco cumplió los 22, fue la última vez que lo vi. Me pidió un euro, y yo no se lo dí. Su mano estaba llena de mierda, sangre, tabaco y pus.
Hoy me he enterado de que ayer lo encontraron muerto en un banco del barrio. En el bolsillo de su asqueroso pantalón encontraron una nota:


GRACIAS.

1 comentario:

Aitor dijo...

Menuda vida habia llevado el chaval, que lo conocistes en el insti o que ??,....bueno el tio a tenido sus momento gloriosos y hasta se convirtió en un especie entre Inventman y jona que asusta xddd,....no me pena....lo siento.....pero si me da pena que la sociedad por culpa de una mala educación y una mala ética, siga ha dia de hoy con estas causas.