lunes, 3 de octubre de 2016

Crítica: Ha vuelto (2015)





Crítica: Ha vuelto (2015)


En medio de una Europa sin rumbo, la historia se repite.


Hitler, Hitler, y más Hitler. Así se presenta la película alemana Ha vuelto del director David Wnedt, basada en el best seller de Timur Vermes.
Muy a mi pesar, y en contra de mis pasiones, he visto la película antes que leer el libro, pero por suerte, o por desgracia, podré tener una crítica diferente a la típica que quiere comparar eternamente si la adaptación es buena, o no.

Personalmente la película me ha encantado, creo que ha sido una obra maestra, y que pone de manifiesto un temor, un recuerdo, una duda, ya no de los espectadores, más bien de la sociedad en general, de la sociedad capitalista del siglo XXI. El argumento es tan sencillo como preguntarse, ¿qué pasaría si Hitler apareciese en Alemania 70 años después? 
La respuesta se manifiesta sencilla, pero como desenvuelve de una forma prodigiosa la obra, no todo es como aparenta. Como describe Vermes, la sociedad no ha avanzado tanto en estos años, y seguramente esos miedos volverían a desarrollarse. El miedo no es otro que la incapacidad de razonamiento de una sociedad (la europea) sin rumbo, narcisista y autocomplaciente. La tesis es clara: Hitler no fue un loco, un excéntrico, o un poseído por el Diablo. El führer era justo lo contrario, un tipo inteligente, decidido y muy lúcido, el problema de fondo no era su personalidad, más al contrario, lo que razonaba. 

Pero el trasfondo del filme no se centra tanto en la figura de Hitler, es más, el autor hábilmente regatea los temas más peliagudos como el antisemitismo o el anticomunismo del líder del Tercer Reich. La esencia del filme va en torno a los postulados de la extrema derecha europea, del miedo al otro (inmigrantes), y del deseo perverso de una clase media de volver a políticas de búnker.

Hitler ha vuelto, o mejor dicho, la extrema derecha, como ya se manifiesta en las grandes economías europeas, ha vuelto. Al igual que hace 80 años se viste de forma sibilina, y con un discurso racista infecta a las clases medias europeas, que más allá de ver el problema de su crisis económica interna en el reparto de cromos de una oligarquía financiera, ataca vehementemente a las clases trabajadoras, primero las que consideran extranjeras, y segundo, aunque todavía está por definir a las clases trabajadoras nativas.




El cuadro es una obra del artista John Heartfield


No hay comentarios: